El auditorio cine Rosales vibró el pasado sábado con una de las noches más intensas y emocionantes que se recuerdan en la historia del Cuervarrozk, el festival referente del Noroeste murciano que, en su 28ª edición, combinó música de alto voltaje con un claro compromiso solidario.
La velada arrancó con Sr. Lobo Cover Fusion Band, que desplegó su habitual potencia y solvencia sobre el escenario, recorriendo con maestría los grandes clásicos del rock en una exhibición de energía bien medida y conexión total con el público.
Uno de los momentos más emotivos llegó con la actuación especial de Germán Meoro y su banda, que interpretaron el tema "Mucho a Mucho", una canción nacida del lema que ha brindado Marta, un verdadero ser de luz cuya lucha y ejemplo han inspirado a todo el municipio y por el que da nombre a la asociación. Este tema se convirtió en un himno de unidad y esperanza, y fue recibido entre ovaciones por un público visiblemente emocionado.
Cabe recordar que todo lo recaudado en esta edición de CUERVARROZK se destinará íntegramente a la asociación "Mucho a Mucho", dedicada a la lucha contra el cáncer infantil. Un gesto que da sentido profundo al arte y a la música cuando se ponen al servicio de una causa que va mucho más allá del escenario.
El cierre fue una auténtica descarga de rock'n'roll con la esperadísima actuación de La Perra Blanco, que convirtió el Rosales en una fiesta sin tregua. Su directo es una máquina imparable de ritmo, carisma y crudeza bien afinada, que puso al público a bailar, saltar y gritar. Fue más que un concierto: fue una declaración de principios rockabilly con alma andaluza y pegada internacional.
Con esta edición, el Cuervarrozk reafirma su posición como uno de las grandes citas musicales del sureste español.
El espíritu del rock&roll está más vivo que nunca. Y en Calasparra, además, late con un corazón gigante.